A dos semanas de las elecciones, los sondeos dan por ganador al ultraderechista Bolsonaro por sobre el candidato del Partido de los Trabajadores.
El progresista Fernando Haddad, quien disputa la segunda vuelta electoral en Brasil con el ultraderechista Jair Bolsonaro, se mostró confiado en su victoria, pese a que un sondeo le atribuyó una enorme ventaja a su adversario.
«Me faltan ocho puntos porcentuales para llegar al 50%», dijo Haddad en referencia a una encuesta divulgada este miércoles, según la cual cuenta con el apoyo del 42% de los electores, frente al 58% que declara voto en Bolsonaro, un capitán de la reserva del Ejército conocido por sus declaraciones racistas, misóginas, homofóbicas y a favor de la dictadura.
El pasado domingo, en la primera vuelta, el ultraderechista logró un sólido 46 % de sufragios, mientras que Haddad fue respaldado por el 29 % de los votantes.
Haddad subrayó que hace «exactamente un mes» que fue proclamado candidato del Partido de los Trabajadores (PT) en sustitución de Luiz Inácio Lula da Silva, hasta ese momento abanderado de esa formación y vetado por la Justicia por su condición de presidiario y condenado por corrupción.
En busca del voto católico
Para ello, Haddad visitó hoy la sede de la Conferencia Nacional de Obispos (CNBB), en lo que fue interpretado como un acercamiento al elector católico con la intención de contrapesar el apoyo que el líder de la ultraderecha logró entre las influyentes iglesias evangelistas.
El candidato del PT subrayó que su programa de gobierno contempla la agenda que propone el papa Francisco, que apunta a «fortalecer la democracia, la protección del medioambiente y la cuestión social».El programa de Haddad no hace referencia al aborto. El candidato dijo en 2012 estar «personalmente en contra» de su legalización. También llamó a «establecer políticas públicas que ofrezcan a las mujeres condiciones de planificar sus vidas».